domingo, 22 de enero de 2012

Un valor mas fuerte que ningún otro

La libertad no se tiene, se conquista. Esto es una idea que en mi opinión, no tiene ninguna razón. La libertad no es algo que se consigue o conquista, es algo que se tiene, y que nadie tiene derecho a quitarte.

Esto no quiere decir que el hecho de que seamos libres no implique que nuestros actos tengan unas consecuencias y estas puedan privarnos de nuestra libertad, pero este no es el tema a tratar.

Las personas son libres desde el momento en que nacen. Somos libres de actuar, somos libres de pensar, somos libres de vivir una vida que nos ha sido regalada. Nadie puede privarte de ese derecho, pues siempre lo tienes presente, más o menos acotado, pero lo tienes.

Libertad es una palabra que se utiliza en imnos, discursos, libros, películas, etc. Es una palabra que transmite una sensación, la cual es descrita con esta misma palabra, y es ese impulso a poder hacer lo que quieras, tomar el camino que tu quieras y pensar de la forma que tu quieras, sin tener que aferrarte a ninguna ideología política solo porque sea la mas poderosa, ni porque la gente te lo diga y si no lo haces te miren mal…

En resumen, la libertad nos brinda la oportunidad de ser diferentes, la oportunidad de cambiar algo, de no seguir la corriente. Nadie puede decirte que no eres libre, o que tienes que ganarte o conquistarte la libertad.

Hay muchos momentos históricos en los que se ha intentado oprimir la libertad de las personas, haciendo que estas se la tengan que ganar o tengan que conquistarla, vease este hecho reflejado en la película “Braveheart” donde William Wallace, quien solo quería una vida con su mujer en escocia, ve su libertad oprimida por la corona de Inglaterra, y tras la muerte de su mujer, este decide enfrentarse a los ingleses y ganar y conquistar su libertad y la de su pueblo.

Pero esta película esta ambientada en el siglo XIII/XIV, donde la situación y mentalidad de las personas llevaba a guerras ya no solo por tierras o asuntos políticos, si no guerras por supervivencia y por conseguir la libertad.

Sin embargo, a día de hoy, la libertad es algo que se tiene, no necesita ser conquistada, y cada persona es libre de hacer con ella lo que quiera, de hay salen los términos libertad positiva y libertad negativa, la libertad positiva como la libertad para desarrollar el potencial propio, pero también existen la libertad negativa, como la libertad de la opresión.

Aunque hay personas que utilizan la libertad negativamente, y por ello son castigadas, la libertad es un derecho con el que se nace, no hay que ganarselo.

La libertad de lo querido.


Todos tenemos una curiosidad, o una tentación, o un miedo; la libertad. La libertad de ser como queremos ser, y no ser como la gente quiere que seamos. Ser capaces de decidir por nosotros mismo sin tener que das pie a nadie. Cada vez que tenemos las ganas o la necesidad de decir algo, a lo que tienes miedo, pero... porque hay que ter miedo de tu propia libertad.

Poco a poco conforme nos vamos haciendo grandes nos vamos haciendo una idea de nuestra libertad y de los límites que ella conlleva. Porque es verdad que tenemos que saber que somos libres pero también saber que hasta un cierto punto. Porque de no ser así, todo sería una catástrofe y cada uno haría lo que le viniese en gana. Para ello se encarga la justica, que es la que se encarga de castigas a aquellas personas que sobrepasan su libertad.

Para verlo más claro, es cuando alguien comete un delito, como por ejemplo un robo o un asesinato, etc. Esa persona puede defenderse diciendo que lo ha hecho por unos motivos y que es libre de hacer lo que quiera, pero no. La libertad tiene unos límites. Y si matas a alguien, la persona fallecida no tenía el derecho de libertad de morir.

De no ser posible la corrección del mal cumplimiento de la libertad, casi nada funcionaria, porque si es verdad que hay gente que no les hace falta que le digan lo que sí y lo que no tienes que hacer. Pero también es verdad que hay gente que si no estuvieran las normas harían lo que les diese la gana sin tener en cuenta lo que le pueda fastidiar al de al lado.

Pero a fin de cuenta es que, en muchas de las cosas que nos rodean tenemos la libertad de decidir que hacer.