El otro día asistimos a un juicio en complementación con lo visto en la signatura de filosofía. La presentación estuvo bien, el juez que iba a presidir el acto nos explico todo el procedimiento que iban a seguir tanto el como el resto de cuerpo legislativo allí presente, así como los cargos imputados al posible culpable y la pena que podían acarrearle. Hasta ahí todo correcto. Entraron en la sala el fiscal, que presentaba los cargos y después el acusado con su abogado. Tras una breve introducción y una presentación de los cargos se le pregunto al acusado si los aceptaba y si acataba la pena que se le imponía. El dijo naturalmente que si, pues le sale prácticamente gratis el delito, todos se levantan y se van. Este es el procedimiento habitual en un juicio, por llamarlo de alguna manera. Un juicio en el que ya de partida se hacen tratos con el acusado para que su pena sea mínima y pueda estar en la calle en un tiempo mínimo, si es que llaga a entrar en prisión. Este fue un ejemplo a pequeña escala de la degradación que ha sufrido la justicia en los últimos años y que crea una especie de ¨buen rollito¨ entre el acusado y el jurado. Una justicia en la que los buenos pasan a ser malos y a los malos se les protege de cualquier cosa. Parece que se ha olvidado la función real de un juicio: Hacer que la persona que ha cometido un delito rinda cuentas no solo ante un tribunal, sino frente a lo que este representa, la sociedad a la que ha hecho daño. Y ya sea algo tan diferente , como un robo a un asesinato, sea castigado con todo el peso de la ley.
Hace poco leí un caso de un hombre que, estando solo en su casa, sufrió el atraco de tres hombres encapuchados y armados con navajas. Aun con todas estas desventajas, el hombre logro hacer que dos de los atracadores huyeran para quedarse a solas con el ultimo, con el que tuvo una pelea mano a mano. No se como el hombre logra quitarle el cuchillo al atracador y le propino varios golpes antes de que huyera. En una sociedad con una justicia normal la cosa habría terminado ahí, pero mi sorpresa fue enorme cuando leí que el atracador que se había enfrentado al hombre le había denunciado por agresión. Y no solo no se le ignoro, sino que la cosa se tomo como algo serio y el juicio esta pendiente por salir.
Todo esto hace referencia a un sistema judicial en el que , como ya he dicho, los buenos son los malos y a los malos se les protege, y si aun no esta demostrado, que se lo digan al acusado del juicio del otro dia que salio de la sala pavoneándose del jurado y del juicio en si diciendo: ¨Pos ya sta, ma salio gratis la droga¨
No hay comentarios:
Publicar un comentario